LA BAJA AUTOESTIMA Y LA INSEGURIDAD

DEJAR DE LADO NUESTROS DESEOS Y ASPIRACIONES POR MIEDO, POR NO SENTIRSE CAPAZ O POR NO CEER MERECERLO ES EL "ANTI PLAN".

Son muchas las personas que acuden a consulta con el afán de lograr sentirse seguras de sí mismas de una vez por todas. 

Pero… ¿Es seguridad lo que estamos necesitando sentir

Cuando pensamos en la seguridad puede que nos vengan a la cabeza conceptos como cinturón de seguridad, distancia de seguridad, guardia de seguridad, válvula de seguridad, medidas de seguridad. Todos ellos, tienen en común el fin de querer evitar un peligro ante una situación de amenaza. 

Pero… ¿Es esa la actitud con la que queremos afrontar nuestra vida?

La evitación es un mecanismo más de afrontamiento y no vamos a juzgar si mejor o peor, aunque si plantear si quizá esa respuesta está siendo la manera de perpetuar tu problema. 

¿Mientras evitas atiendes a lo que realmente quieres? ¿Eso refuerza tus sentimientos de valía y autoeficacia o aún los debilita más?

LA SEGURIDAD, PAN PARA HOY HAMBRE PARA MAÑANA

La falta de autoestima puede englobar muchísimos matices, pero a grandes rasgos podría medirse por la dificultad en saberse percibir como una persona valiosa y consciente de su potencial, mostrándose altamente influenciable a las opiniones ajenas, acontecimientos diarios y a sus propios pensamientos críticos y destructivos.

Abogando por la seguridad como herramienta para afrontar, como hemos visto, ésta nos permite evitar lo temido y por lo tanto abordar situaciones que podemos anticipar. Pero, ¿Podemos prevenir y controlar todo lo que nos va a tocar vivir? Obviamente la respuesta es un NO como una catedral! Así, si aceptamos que el control es pura fantasía, ¿qué nos queda para salir de ahí?

ENTENDER, ACEPTAR Y CONFIAR

Solo cuando entendemos que el control es una falacia, aceptamos que nos pasamos la vida fantaseando con la ilusión de controlar lo que somos, lo que sentimos, lo que nos pasa y lo que vivimos. 

Cuando aceptamos que aquí nos toca dirigir la orquesta, pero no de elegir si un músico está indispuesto o en qué ciudad vamos a viajar, asumimos que sólo podemos elegir con qué traje tocar para lidiar con esa circunstancialidad.

Podemos salir mirando al suelo o podemos saludar, podemos mantenernos en silencio o incluso bailar, podemos interactuar con 5 instrumentistas o con los 50 que estén sentados dispuestos a tocar, podemos ceñirnos a partituras ajenas o podemos componer las nuestras. Podemos ni tan siquiera subir a la palestra o podemos salir y confiar.

¿EN QUÉ TE PODEMOS AYUDAR?

La confianza nos permite afrontar, arriesgar, tomar decisiones sin estar completamente seguros de obtener los resultados deseados, nos permite conectar con la posibilidad de poder conseguir algo aún desconociendo exactamente el cómo, la confianza nos permite no temerle a lo nuevo, compartir nuestros sentimientos con otras personas, perseverar y entender que el fracaso no es una amenaza, sinó fuente de información y aprendizaje.

Es por eso, que aún no estando seguros, confiar nos permite avanzar. Confiar en ti mismo, confiar en que pase lo que pase vas a saber encontrar el modo de afrontarlo, confiar en que si no sabes puedes pedir ayuda, confiar en que tienes la capacidad o vas a saber adquirirla, confiar en los demás, confiar en que no eres una única versión de tí mismo, que puedes aprender y en que puedes cambiar.

Pero, el poder de confiar en ti a veces no es innato o no aplica por igual en todas las facetas de tu vida. Se construye y se aprende.

En terapia podemos ayudarte a:

  • Detectar dónde tu capacidad de confiar se manifiesta con más intensidad y valía en tus distintas facetas.
  • Extrapolar esta sensación a los espacios, momentos o tareas donde sientes necesitarla. 
  • Construir esta creencia mediante pautas, ejercicios y herramientas con el fin de lograr que te sientas capaz o suficientemente bueno para ti, para alguien o para algo nos puedes contactar.